25 sept 2009

Quiero y no llego




Quiero contar tantas historias que revolotean por mi cabeza...que el tiempo pasa, intentando seleccionar cuál es la más apropiada...y entonces...llega la noche.

Veo las estrellas y sigo emocionándome...Algo que espero no deje de hacer..

Hago todo cuánto me apetece ¿acaso hay mayor gozo para los sentidos?

Los sentidos me impulsan y persisto en mi empeño por conocer más...mucho más...de aquello que otros se niegan...porque sin duda es un gran abismo...intentar tocar lo volátil, saborear un aroma, embriagarme del aire, saber bailar al compás de un susurro...

Una imagen: los niños jugando, en una playa maravillosa, al caer el sol...Quizás nunca recuerden lo felices que estaban siendo, ni tan siquiera sepan lo feliz que me hicieron a mi, al poder contemplarles...mientras recordaba los años perdidos, de inocencia pura, cuando jugaba con mi hermano...

Aún puedo tocar su arena, pese a la distancia, aún puedo oler la mar, pese a no tenerla, aún puedo ver los rostros, aunque me cegara el sol...porque en esencia...estaba tan llena de gozo, que sólo me nutría de sueños que quiero y quizás no llegue a tocar...pero siempre imaginaré cuánto sentiría al hacerlo...